En la primera parte de este post expusimos las principales opciones que tienen los exempleados de banca para reinventarse profesionalmente. Y decíamos que una de ellas es recolocarse en un sector afín como el de las franquicias de seguros.
Uno de los motivos es que el sector asegurador ha afrontado mejor que el bancario esta caída general del empleo provocada por la crisis. En los últimos años el asesoramiento y la contratación de seguros han seguido una línea moderada de crecimiento, que se ha mantenido también durante todo el confinamiento tanto en empleo como en salarios.
Y aunque el número de pólizas de seguros de comercio ha bajado por el gran número de negocios que se han visto obligados a cerrar, el interés por la contratación de seguros de salud, vida y decesos se ha disparado desde el inicio de la pandemia. Al igual que las empresas, que están más interesadas que nunca en tener sus negocios bien asegurados.
Por otra parte, el auge del teletrabajo, las ventas online y las actividades relacionadas con el ocio digital ha provocado un aumento también de los ciberdelitos, por lo que los productos y servicios relacionados con la ciberseguridad, como los ciberseguros, han crecido y crecerán en gran medida.
Pues bien, para comercializar seguros en España existen varias fórmulas. Una de ellas es la de corredor de seguros. Esta figura en concreto supone una magnífica oportunidad de desarrollo profesional por varios motivos. A continuación te mostramos algunos:
5 razones para trabajar como corredor de seguros
La mediación en seguros supone una opción excelente de recolocación laboral. Todas aquellas personas que han pasado por el sector bancario, por puestos comerciales o de gestión, y quieren desarrollarse profesionalmente sin depender de terceros, sin temor a un despido o ajuste en su empresa, tienen ante sí una posibilidad de desarrollo profesional muy interesante.
Estas son, a grandes rasgos, las principales razones para trabajar como corredor de seguros:
1. La titularidad de la cartera será tuya
A lo largo del tiempo el corredor de seguros va generando un patrimonio propio: la cartera de clientes, que va a generar unos ingresos crecientes y recurrentes, y un rendimiento que le va a aportar estabilidad en el futuro. Una cartera de clientes consolidada es la mejor garantía de ingresos.
La de corredor de seguros es una profesión en la cual el techo retributivo del negocio lo define el propio profesional. Ganarás el dinero proporcional a lo que produzcas (nueva producción) más lo acumulado de cada vencimiento (cartera) por lo que los ingresos se irán multiplicando cada año.
2. Puedes heredar, vender o traspasar tu cartera de clientes
Otra ventaja es que si decides cambiar de actividad profesional, o cuando llegue la hora de jubilarte, puedes vender o incluso dejar en herencia tu cartera de seguros a tus hijos para que ellos sigan atendiéndola. De esta manera el esfuerzo que has dedicado no se pierde ya que es un ingreso que mientras se siga trabajando seguirá dando frutos.
3. Flexibilidad de horarios que te permite conciliar tu vida familiar y personal
Una de las ventajas que más valoran las personas que optan por emprender en mediación de seguros es la posibilidad de tener autonomía empresarial y flexibilidad de horarios. Marcar tu propia agenda supone un cambio importante en la vida de estos profesionales, en muchas ocasiones, acostumbrados durante muchos años a tener jefe. Depender de uno mismo te permite conciliar el trabajo con la vida familiar y personal.
4. El corredor de seguros orienta su actividad hacia el cliente
El “saber hacer” del sector asegurador ha sido sin duda una de las razones que más ha influido en su credibilidad. Los mediadores de seguros han sabido estar al lado de sus clientes, conociendo sus verdaderas necesidades en sus propios hogares y negocios. Lejos de “colocar” productos para la consecución de objetivos, el mediador de seguros sitúa al cliente en el centro del proceso y le propone una oferta aseguradora adecuada a sus intereses, presupuesto y tipo de actividad. El sector asegurador lleva la delantera al bancario en este aspecto tan decisivo.
5. El sector asegurador es un sector consolidado y estable
El sector asegurador demostró una gran capacidad de resistencia durante la crisis financiera de 2008. Las entidades conservaron en general su facturación y el capital humano apenas se vio reducido. Durante la grave crisis sanitaria generada por el Covid-19 también ha mostrado su fortaleza. La mediación en seguros no paró ni siquiera en el confinamiento. El sector asegurador está plenamente preparado para superar cualquier escenario de recesión.