Valenciana Shock, franquicias de heladerias artesanales, fomenta el autoempleo con el reajuste de sus condiciones de franquicia. La franquicia, gracias a nuevas condiciones con proveedores, ha logrado reducir la inversión inicial a 81.650 euros. Además, refuerza el apoyo a sus franquiciados regalándoles 890 euros de stock gratuito.
Además de optimizar las condiciones con sus proveedores, la franquicia de helados ha logrado, por otra parte, reajustar gran parte de las partidas iniciales a favor del franquiciado. Así, la franquicia se ha convertido en la opción de autoempleo ideal para aquellos emprendedores que estén barajando iniciar un negocio bajo la fórmula de la franquicia.
El origen de Valenciana Shock se remonta al año 1961. La firma de franquicias cuenta en la actualidad con tres locales operativos en Salamanca y Zamora.
Un negocio sólido en franquicia
Valenciana Shock está buscando socios interesados en compartir su dilatado saber-hacer en el mundo de la heladería y la restauración. Los establecimientos de la franquicia Valenciana Shock, de a partir de 80m2, deberán contar con una amplia fachada, un pequeño almacén y situarse en calles de primer orden, turísticas o de ocio nocturno, con un alto tránsito peatonal.
Con una inversión inicial a partir de 81.650 euros (mobiliario, maquinaria, equipo de imagen y sonido y canon incluidos) y un royalty del 2´5% sobre el volumen de facturación, la central de franquicias ofrece a sus futuros socios todas las ventajas de un modelo de negocio de rentabilidad testada y apoyo en la selección del local, en la formación del personal y en la puesta en marcha del negocio.